Detalles en la casa. Por todos lados. Un foco que anda intermitente. Una llave que gotea, etc.
Yo no soy precisamente lo que se conoce como handyman, pero mi espíritu aventurero y audaz como ninguno, combativo como pocos se impondrá a la huevonez. Así que encarando mis más grandes retos en esta vida he decidido hacer algunos pequeños arreglos.
Empecé por hacerme de nuevo de juguetitos. Mi compi beto siempre se burló de mi vieja caja de herramientas quesque porque nomás tenía dos destornilladores y unas pinzas, así que esta vez me compré varios destornilladores:
Una vez que los saqué de sus monturas, le pregunté al encargado si servían para algo. Por la risa contenida que le vi supe que no. Pensé en comprar un taladro, pero no supe cual llevar. Mi compi me prestó uno hace tiempo, dijo que tenía uno pequeño y uno grande porque el "ya hacía chambas más chonchas" Yo me lo imaginé construyendo naves industriales que se miden en hectáreas o portaaviones para la Marina de EU, así que decidí que si lo ocupaba me las arreglaría pidiéndole a mi compi el chiquito (sin albur, puercos)
Ok, el primer problema fue tratar de abrir mis juguetes nuevos. Ya en serio, ¿por qué los empaquetan como si los fueran a enviar a años-luz de aquí? ¡Es casi imposible abrirlos!
Intenté de varias maneras:
Pero a fin de cuentas, mi fiel cuchillo dentado (es tema de otro post) me ayudó (nota mental: faltó comprar un cutter) y en menos de 20 minutos logré abrir el empaque:
Ah y la primera cortada fiel testigo de mi audacia. Me corté leve un dedo con el empaque de las pinzas. Ok, así que manos a la obra!
RETO 1: Foco que da a la calle inservible.
Un consejo antes de seguir con este rollo en otro post:
Desconecten la corriente eléctrica ANTES. Auch.
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