viernes, enero 13, 2012

Ando prófugo



¿Ya les había contado? vivo enfrente de una escuela primaria, por lo que hay varios inconvenientes al respecto:
1. Como Salubridad y la SEP habían prometido retirar a los vendedores callejeros de fritangas y así, pues abundan afuera de mi casa a la hora de la salida, ya se imaginarán lo bonito que se ve mi calle llena de bolsas de plástico, restos de papitas, etc.
2. A las 8 am y a la 1 pm el escándalo me recuerda un documental de National Geographic de la selva tropical.
3. El tráfico a esas horas hace IM-PO-SI-BLE que pueda yo mover mi Mercedes con libertad.

Pero lo peor es que a la gente LE VALE MADRE la otra gente.  Y es que la semana pasada llegué a mi mansión para darme cuenta de que por enésima vez había alguien estacionado en mi cochera… pero antes: un antecedente más:

Hace medio año alguien se estacionó en mi cochera aún viendo que mi coche ESTABA DENTRO. Y Todavía no sería tan grave si la bruja que se estacionó hubera dejado a alguien cerca, o un número de teléfono o simplemente no se hubiera tardado (eso ya raya en el colmo de la tolerancia por parte mía) pero no. La doñita que dejó su camioneta chocolate la estacionó, puso velocidad, freno, la cerró perfectamente y se largó a la junta de padres de familia de la escuela.

Por supuesto que después de estar MEDIA HORA con el portón abierto, sonando mi claxon para ver si aparecía, decidí que lo mejor era ir a buscarla dentro de la escuela. Al pasar por la entrada le disparé lásers con mis ojos al policía que "dirige" el tráfico. Debió de activar su campo de fuerza invisible, porque hizo como si le valiera madre.

Y por supuesto que la busqué de salón en salón, pedí que la vocearan, organicé filas de prisioneras para revisarlas en busca de las llaves, ejecuté a unas 15 personas…

Nada.

Así que regresé a rumiar mi coraje afuera de mi casa con el portón abierto. El poli se me quedaba viendo, pero con esa expresión de "¿pos qué quiere que haga?"

Pasaron 10 o 15 minutos más hasta que la vieja salió a mover su ranfla. La cabeza agachada, y a pesar de ser una ballena debo reconocer que se movía con bastante celeridad. Esperé hasta que se puso delante de mi carrito y empecé a sonar el claxon.

Recuerdo que me dijo "ya, ya… tranquilo… perdón" y me di cuenta de que mis rayos láser ópticos y mis superpoderes habían valido madre.

Bueno, hace una semana, lo mismo.

Yo había salido de casa "a hacer un mandado" y después de 20 min. regresé para encontrar el carro de un idiota estacionado perfectamente afuera de mi cochera… Dí dos vueltas dos con mi mercedes, tratando de imaginar cómo estacionarlo. En mi cuadra son puras cocheras, saben.

Así que me valió como al dueño del carro y al inútil poli y me estacioné en doble fila, tapando la puerta del conductor del dueño de la cafetera esa. El poli me dijo desde lejitos "oiga ¿se va a tardar?" yo ví mi reloj. Ya casi era hora de salida de la escuela.

Así que le sonreí y le dije "pues aquí vivo… ¿tú que crees?" Eso funcionó más que mi mirada láser y mi poder de dominación mental, porque el poli se frunció todito, se dio la vuelta y ya no dijo nada. A los 15 minutos alguien tocó a mi portón.

–¿Oye, ¡perdón! ¿vives aquí?
–Sí, aquí vivo, "buenas tardes"
–Oye, ¿puedes mover tu Mercedes Kompressor®? es que no puedo entrar a mi carro para moverlo y ya no estorbarte…
Miré mi reloj nuevamente y le dije "Pues mira, yo apenas voy a preparame algo de comer, y luego me echo una siestecita, así que cuando tenga chance lo muevo con mucho gusto, una o dos horas, no más… lo prometo"

El tipo se molestó. Yo creo que no esperaba esa respuesta, porque dio unos pasitos para atrás, luego se regresó, como que estaba tratando de organizar sus pensamientos. Pero… ¿qué creen? no lo logró:

–Mira, no seas malito, la neta «a todos se nos ofrece» (primer FAIL)
–¿Huh? ¿se nos ofrece?
–Bueno, bueno yo sé qué estoy mal, pero «ya me disculpé» (strike DOS)
–Oh, bueno… con gusto acepto la disculpa, eres muy amable… muchas gracias, buenas tardes…

Me di la vuelta para entrar en mi casa y el tipo (que aún no se había dado cuenta de que PODÍA ENTRAR POR EL OTRO LADO) me suelta:

–Ok, mira nomás una cosa te digo: «te aseguro que TÚ haces lo mismo»



















Y entonces ya no supe de mí.


Así que con su permiso, espero que tan pronto me instale en mi nueva casa en un sitio en el que nadie me encontrará, vuelva a postear algo aquí. Mientras tanto, no hagan olas. No me conocen.

1 comentario:

El Zórpilo. dijo...

Ja,ja,ja, no se me hubiera ocurrido esa respuesta...

Saludos sin ocurrencias.

El Zórpilo.